04 agosto, 2006
Me detengo en su mirada,
fatídicamente hermosa,
me insinua los remolinos del viento.
Me despeina y juega con mi pelo,
sus manos recorren mi rostro en un suave descubrimiento,
se detiene en mis labios y sus dedos los dibujan a su antojo.
Es el preludio del beso de mis deseos.
No hago más que esperar sus labios.
El primer roze de sus labios en los míos.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Qué hermosa imagen, qué buen momento...
ResponderBorrarel mejor momento..
ResponderBorrar:D
ResponderBorrar:)...besitos..
ResponderBorrarDibujándola como si saliera de mi mano...
ResponderBorrarY los ojos se hacen uno, y jugamos al cíclope
..en una sola mirada, Barón...todas las imagenes se conjugan...
ResponderBorrar